El cambio climático afecta a la salud y la calidad de vida, pero no afecta a todo el mundo de la misma manera. Por eso, el Plan Clima no puede responder a los efectos que se deriven sobre la ciudad y su ciudadanía de una forma homogénea. Las medidas impulsadas tienen que priorizar a los colectivos más vulnerables al cambio climático.

Líneas de acción

1. Cuidar de todo el mundo

Mejorar y adaptar los servicios, los equipamientos y las viviendas de las personas, especialmente las más vulnerables al cambio climático.

Medidas:

  • 1.1. Proporcionar ayudas y subvenciones para la mejora energética de viviendas y prioritzar la actuación sobre las viviendas de familias vulnerables y en riesgo de exclusión social (anualmente).
  • 1.2. Impulsar la figura del agente energético para asesorar y acompañar a la ciudadanía en la mejora de hábitos de consumo (2020).
  • 1.3. Reforzar los servicios de movilidad para los barrios y las personas más vulnerables (transporte público, servicios específicos de movilidad a demanda para las personas con problemas de salud, bicing eléctrico, etcétera) (2020).
  • 1.4. Reforzar los servicios dirigidos a las personas más vulnerables en las oficinas de atención ciudadana (OAC) para ayudar a prevenir los efectos del calor y otros acontecimientos climáticos extremos (2020).
  • 1.5. Mejorar la red social de las personas mayores que viven solas y reforzar proyectos ya existentes (“Vínculos”, “Radares”, etcétera) y acciones específicas sobre colectivos vulnerables en el servicio de teleasistencia (2020).
  • 1.6. Impulsar la “Escuela de los cuidados”, dirigida a la formación continuada de las personas profesionales de los cuidados y de familiares de personas dependientes (2020).
  • 1.7. Estudiar la creación de la Tarjeta Cuidadora, dirigida a reconocer la importancia de las personas dedicadas al cuidado, con descuentos en transporte público y otros Servicios municipales (2020).
  • 1.8. Diseñar proyectos piloto de supermanzanas sociales, orientadas al servicio integral de atención a las personas dependientes desde equipos de servicio de atención domiciliaria de proximidad (2020).
  • 1.9. Adaptar y mejorar los servicios de atención a las personas para ayudarlas a hacer frente a los impactos del cambio climático sobre la salud (2025).
  • 1.10. Crear un centro de atención y un espacio de información de la economía de los cuidados (2025).
  • 1.11. Incorporar la variable climática en los cuidados adaptando los servicios existentes y poniendo en práctica nuevos servicios (2025).
  • 1.12. Facilitar el empleo de las personas, especialmente las más vulnerables, en sectores económicos emergentes vinculados a la economía verde, solidaria y circular, y dar al Programa Labora una visión ambiental (2025).
  • 1.13. Rehabilitar las viviendas mejorando el aislamiento, sustituyendo instal·lacions eléctricas obsoletas, optimizando la potencia contratada y facilitando el acceso a electrodomésticos más eficientes, y prestar una atención especial a los hogares más vulnerables (2030).
  • 1.14. Reducir las molestias ocasionadas por los malos olores mediante la mejora de los sistemas de recogida de residuos y del alcantarillado en caso de calor (2030).
  • 1.15. Extender la implantación de las supermanzanas sociales al conjunto de la ciudad, ampliar los servicios de proximidad a los colectivos con dependencia y reforzar el conjunto de los servicios de cuidado (2030).

2. Sin cortes

Garantizar los derechos energéticos para todos. Evitar los cortes de suministro de electricidad, gas y agua, especialmente a las personas más vulnerables.

Medidas:

  • 2.1 Promover las acciones y los acuerdos para garantizar el abastecimiento público del agua potable en la ciudad, con garantía de calidad,cantidad y continuidad, al precio justo, para toda la ciudadanía (2018).
  • 2.2 Revisar la tasa de alcantarillado para que incorpore bonificaciones en el importe de la tasa para colectivos sensibles (2018).
  • 2.3 Trabajar para dar respuesta a las necesidades de las personas en términos de suministros y, al mismo tiempo, mejorar la eficiencia en los consumos, así como garantizar el consumo básico esencial de agua potable, electricidad y gas para todo el mundo, poniendo especial énfasis en las personas en riesgo de exclusión social (2018).
  • 2.4 Crear una comercializadora energética municipal al servicio de toda la ciutadania (2018).
  • 2.5 Desplegar el operador energético municipal que impulse la producción de energías renovables en el municipio y facilite la implantación en espacios tanto públicos como privados (2020).
  • 2.6 Mejorar el conocimiento sobre la relación entre pobreza energética y salud a través de la Encuesta de salud y de estudios específicos que proporcionen indicadores (2020).
  • 2.7 Reforzar los puntos de asesoramiento energético (PAE), que ofrecen la información, la atención y la intervención necesarias para que las personas puedan ejercer sus derechos energéticos y las compañías no les nieguen el acceso a los suministros básicos. Promover, desde los PAE, la tramitación de los bonos sociales, el consumo de energía renovable y la divulgación de ayudas destinadas a mejorar la eficiencia energética de los hogares y empoderar a la ciudadanía para hacer un consumo responsable y racional de la energía (2020).
  • 2.8 Promover y priorizar la autoproducción de energía proveniente de fuentes renovables y hacerla accesible también a los hogares vulnerables (de manera continuada).
  • 2.9 Promover “bancos de energía” que ayuden a cubrir las necesidades de los hogares con vulnerabilidad energética (2025).
  • 2.10 Estudiar el impacto que el cambio climático puede tener en el precio de los suministros básicos y la alimentación (2025).
  • 2.11 Garantizar el abastecimiento de agua y energía y la continuidad de los servicios de los equipamientos y las infraestructuras críticas (centros sanitarios, centros de servicios sociales, escuelas, residencias, etcétera) durante situaciones de emergencia (calor extremo,inundación, cortes de electricidad, disponibilidad de agua, etcétera) (2030).

 

3. Prevenir el calor

Mejorar las condiciones de confort térmico en edifi caciones y espacios públicos de la ciudad y crear una red de espacios de refugio climático ante altes temperaturas, para garantizar la salud y tener especial cuidado de los colectivos más vulnerables.

Medidas:

  • 3.1 Revisar el Plan de actuación para prevenir los efectos de las olas de calor sobre la salud en vista de los resultados de las proyecciones climáticas de futuro para Barcelona (umbrales de activación también teniendo en cuenta temperaturas mínimas, necesidad de reforzar actuaciones y servicios, etcétera), e incorporar la visión del territorio y de su vulnerabilidad. Establecer protocolos apropiados para los trabajos ejecutados en el exterior cuando la temperatura supera los 30 ºC. Evaluar la efectividad (2020).
  • 3.2 Identificar espacios de refugio climático existentes y potenciales: equipamientos públicos y privados y espacios públicos (como parques y jardines) que pueden proporcionar condiciones de confort térmico en episodios extremos y establecer los servicios que estos espacios deberían ofrecer vinculados a protocolos de actuación para olas de calor, además de cuantificar los recursos adicionales necesarios (apertura de parques 24 horas, utilización de patios de escuelas “enverdecidos”, interiores de isla, etcétera). Registrar el grado de cobertura para garantizar la equidad territorial y tener en cuenta los ámbitos identificados como más vulnerables al calor (2020).
  • 3.3 Priorizar las actuaciones refrescantes (más verde, reconversión de lagos y fuentes para hacerlos accesibles, etcétera) que se hagan en los ámbitos territoriales más vulnerables a calor (2020).
  • 3.4. Profundizar en el conocimiento sobre cómo el cambio climático afecta a la salud y a la mortalidad de las personas en cada barrio, a través del proyecto europeo de investigación financiado por Climate-fit.city, donde participan la ASPB y el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGLOBAL) (2025).
  • 3.5. Profundizar en el conocimiento del clima urbano con la implantación de una red de estaciones meteorológicas fijas (para recoger datos que permitan conocer su efecto sobre la salud u otros sectores de interés) y estaciones puntuales o móviles (que permitan evaluar la efectividad de las medidas aplicadas, como la medida de las variables climáticas antes y después de intervenciones piloto sobre el espacio urbano, especialmente en entornos identificados como más vulnerables) (2025).
  • 3.6. Crear el programa “Barcelona, ciudad de sombra”, de intervención sobre el espacio público para generar más zonas de sombra: incrementando la cobertura del verde o a través de elementos de mobiliario urbano, preferiblemente multifuncionales (como pérgolas fotovoltaicas generadoras de energía), o elementos textiles efímeros o estacionales. Identificar y registrar los itinerarios. Fomentar la creación de sombra en el espacio libre privado (2025).
  • 3.7. Crear jardines de agua (rociadores, Fuentes accesibles, lagos, piscinas, etcétera) con juegos infantiles que combinen actuacions permanentes con actuaciones efímeras o estacionales. Estos jardines tendrán que ser asumibles con respecto al consumo de agua, cumplir todos los requerimientos sanitarios necesarios y estar distribuidos equitativamente en el territorio (2030).
  • 3.8. Mejorar el confort térmico de los equipamientos de refugio climático, interviniendo de manera prioritaria sobre los que proporcionan Servicio a la población más vulnerable (escoles bressol, colegios, residencias, etcétera), sin que eso suponga un incremento del consumo energético (utilizando medidas pasivas como la ventilación cruzada, la mejora de los aislamientos, el oscurecimiento —luz natural disipada— o la geotermia para refrigerar, entre otros), en la medida de lo posible (2030).
  • 3.9. Crear nuevos espacios de refugio climático (espacios verdes o equipamientos) para garantizar la cobertura territorial (2030).
  • 3.10. Reforzar las plantillas de los servicios sanitarios para afrontar las olas de calor (2030).
  • 3.11. Intervenir sobre los pavimentos y las azoteas de la ciudad para incrementar el índice de reflectancia y contribuir a mitigar el efecto isla de calor (2030).