‘Una família molt antiga’, visita a una domus romana

Vestibulum, atrium, cubículum, triclinium... Son palabras que quizás no hayáis oído nunca, pero que resultaban muy familiares a los romanos que vivían en Barcino, la antigua Barcelona, hace dos mil años. Términos que designaban salas y habitaciones muy parecidas a las de vuestros hogares y que distribuían los usos en la casa romana típica, la domus. Normalmente, estas casas tenían una planta baja rectangular y pocas ventanas al exterior, pero su patio central facilitaba la ventilación y la iluminación de las distintas estancias. La domus era, fundamentalmente, una casa urbana, el domicilio habitual de gente con dinero y de patricios, y sus dimensiones y el grado de lujo variaban mucho en función de las posibilidades económicas de cada familia.

Ahora, el Museo de Historia de Cataluña os invita a conocer los secretos e intimidades de una domus romana. Descubriréis cómo las casas se repartían en la ciudad, con jardines y ricas decoraciones ornamentales, para señalar que sus habitantes eran familias acomodadas. Veréis cómo es una domus ... y tal vez formaréis parte de la familia, ¡como un hijo o una hija más! De este modo, podréis observar cómo se relacionaban con los padres y madres o con los abuelos, y cuáles eran sus costumbres. ¿Sabíais que rendían culto a los dioses protectores del hogar? Pues, tomando su ejemplo, al final de la visita modelaréis nuestro propio amuleto protector.

¡Formad parte de Una familia muy antigua!