Una aproximación al neolítico a partir de La Draga

El neolítico es, probablemente, la etapa historia más trascendente para la humanidad, ya que fue el momento en que se dio el salto de la edad de piedra, el paleolítico y la sociedad basada en el nomadismo, la caza y la recolección, a una sociedad más avanzada a partir del descubrimiento de la agricultura y la organización social a partir de asentamientos fijos. Es el neolítico cuando comienza a tomar forma el concepto de civilización –que, además de articularse a partir de un modo de producción y una cultura, tiene como elemento fundamental la voluntad de permanencia en el tiempo–, y en Cataluña tenemos restos muy bien conservadas de restos neolíticos que nos permiten conocer de primera mano una gran cantidad de aspectos que nos descifran y muestran cómo era la vida en la prehistoria, hace más de 7000 años atrás. En 1990, a orillas del lago de Bañolas, se descubrió La Draga, un asentamiento neolítico bastante bien conservado que, desde entonces, se ha estudiado y se ha excavado a fondo. Ahora, una exposición en el Museo de Arqueología de Cataluña, nos traslada al neolítico a partir de la experiencia de La Draga.

Se trata de la muestra 'La revolución neolítica', que lleva el subtítulo de 'La Draga, el poblado de los prodigios', y que estará abierta hasta el próximo 4 de febrero. Se trata de una selección de objetos extraídos del asentamiento de La Draga y que nos dan pistas sobre los aspectos de la vida diaria en el Mediterráneo al quinto milenio antes de Cristo. Una época antigua, muy alejada de nosotros, pero que fue el primer paso que desencadenó el camino histórico que nos ha llevado hasta aquí, el primer capítulo de un proceso civilizador.

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