¡Alabado sea Mozart y los hombres de bien!

El próximo 6 de abril, el Palau de la Música retrocederá en el tiempo hasta octubre de 1960. En esa fecha y en este mismo escenario comparecen los artistas de La Catalana, una humilde compañía lírica que aguarda con impaciencia la llegada de Néstor Ortiz, el jovencísimo tenor que desempeña el papel de Tamino. En la platea, el cónsul de Austria y los miembros del jurado del Festival de Salzburgo han venido a seleccionar a una compañía extranjera para representar La Flauta Mágica en su país.

La situación se agrava cuando Ricardito Malecanta, el hijo de la propietaria de la compañía, se postula para sustituirlo. Relegado habitualmente al papel Monostatos —como mal menor, dada su incapacidad para el canto—, el muy malandrín quiere aprovechar la ocasión para convertirse en la estrella del espectáculo.

A pesar de las reservas del resto de compañeros y compañeras, la función debe empezar. Y cuando todo parece dado y bendito, y ante el asombro general, se oye una voz maravillosa procedente del fondo de la sala que canta “Zu Hilfe! ¡Zu Hilfe! Sonst bin ich verloran”. ¡Es Néstor, que, al final, gracias a Mozart, ha podido coger el primer tren!

Y cuando todo parece salvado, resulta que un concejal mediocre y grasiento —conchorchado con Ricardito Malecanta— ha preparado varias trampas para hacer que todo se vaya a pique. Pero Mozart, desde el cielo, volverá a bajar a la Tierra para defender la bondad.

Esta es la lección elemental de La Flauta Mágica: el bien siempre triunfa sobre el mal. Por este motivo, esta versión semiescenificada de la Ópera Popular de Barcelona “quiere ser un humilde homenaje a todas las compañías líricas que recorrieron los caminos del mundo, con amor”.

El precio de la entrada oscila entre 38 y 78 euros y puede adquirirse de forma anticipada clicando aquí. También podéis llamar al 93 295 72 07 o escribir a taquilles@palaumusica.cat