Paseos por el pasado marinero

Tanto por su contenido como por su continente, el Museo Marítimo de Barcelona es uno de los lugares de la ciudad que hay que visitar a menudo. Ubicado en el emblemático edificio de las Atarazanas Reales, el lugar donde se construyeron las embarcaciones militares del siglo XIII al XVIII, el museo refleja el estrecho vínculo de Barcelona y Cataluña con el mar a lo largo de la historia así como muchos otros aspectos de la relación del ser humano con el medio marino. Ahora, una gran muestra de sus montajes y colecciones se pueden visitar de manera virtual y gratuita desde su sitio web.

Dos de las visitas virtuales más destacadas son las de las exposiciones Atarazanas y galeras y 7 barcos, 7 historias. El recorrido os permitirá disfrutar de la belleza arquitectónica del recinto, conocer su historia y al mismo tiempo descubrir algunas de las embarcaciones con que se intentó conquistar el Mediterráneo, como la majestuosa réplica de la Galera Real, una nave del siglo XVI que participó en la batalla de Lepanto y a bordo de la cual viajó el mismo Miguel de Cervantes. Dos exposiciones compuestas por imágenes del museo y del Instituto de Estudios Fotográficos de Cataluña muestran la evolución del litoral catalán y de la navegación mercante durante el siglo pasado. Son La playa, un espacio cambiante, que ilustra la transición de un medio tradicionalmente pesquero hacia la explosión turística y demográfica de los años 60, y Barcos mercantes: de la vela en el motor, donde la máquina de vapor desbanca el comercio marítimo impulsado por el viento.

El museo ofrece asimismo la posibilidad de explorar el patrimonio marítimo con algunas de sus colecciones digitalizadas. Una de ellas, la Carta náutica de 1509, nos desvela la intensa actividad cartográfica del Mediterráneo del siglo XVI gracias al auge del comercio marítimo de aquella época. Otra colección, Descubriendo la Barcelona de 1912, parte de una pintura del artista A. Casals para explicar algunos aspectos del funcionamiento y la técnica del muelle industrial de la ciudad a principios del siglo pasado. Pero si queréis ampliar conocimientos y satisfacer vuestra curiosidad, no os perdáis la colección Tesoros, donde un montón de objetos testimonian el pasado marítimo barcelonés y catalán: fotografías, grabados, instrumentos navales, modelos y maquetas, mapas, objetos relacionados con la navegación submarina o, incluso, exvotos que los marineros llevaban a alguna iglesia como muestra de agradecimiento a Dios por haber salvado sus vidas.

Descubrid todos los contenidos virtuales en este enlace.