'Gente bien' prorroga hasta el 12 de febrero

Gente bien, el musical, el último montaje ideado por la compañía La Cubana a partir de un sainete publicado hace cien años por Santiago Rusiñol, lleva el camino del éxito en su estancia en el Teatre Coliseum. En cartel desde finales de septiembre, ya han ocupado las butacas del teatro más de 50.000 personas, lo que ha llevado a la compañía encabezada por Jordi Milán a anunciar una primera prórroga del espectáculo hasta el 12 de febrero.

Gente bien contiene los mejores ingredientes que caracterizan La Cubana, como son la sorpresa, el humor, la ironía, la participación del público... Lo que durante los primeros minutos podría parecer un musical, digamos, clásico, termina dando un vuelco y convirtiéndose... en otra cosa (no lo explicaremos mucho para no aplastar el ingrediente sorpresa). Sí que podemos decir -porque los mismos protagonistas lo han soltado en alguna entrevista- que más de un espectador sale del Coliseum sin saber si ha visto la obra o bien sólo un ensayo general con público de la misma, y con la idea de ir a comprar entradas para cuando realmente se estrene... Los que ya habéis ido, seguro que lo entendéis.

La acción se sitúa en varios momentos del siglo XX, demostrando que los mismos tics que describió Santiago Rusiñol para una determinada época y clase social se han ido manteniendo a lo largo de los tiempos, quizás con otras estéticas pero no con otras éticas. El director Jordi Milán juega un papel bastante activo en el transcurso de la obra, y entre las actrices más conocidas que toman parte del repertorio están Mont Plans y Mercè Comes, habituales de La Cubana. Precisamente los tres protagonizan una de las últimas escenas, que muchos han querido leer como un brindis por el teatro y por el trabajo hecho, y otros incluso como un brindis de despedida. Destacar finalmente la música, compuesta expresamente para el espectáculo por Joan Vives.