'Robert': amor y machismo en la Sala Melmac

Es una obra de la dramaturga Laia Alsina Ferrer y su compañía, El Martell. Es un joven colectivo escénico dedicado a hacer un teatro político que ponga en cuestión las estructuras de poder en los ámbitos más diversos. Su nombre, de hecho, proviene de una cita de Bertold Brecht que decía que el teatro no debe ser un espejo que refleje la realidad, sino un martillo con el cual se le dé forma.

Siguiendo el consejo del maestro, Laia Ferrer emplea su martillo y proyecta una mirada crítica sobre un sentimiento que parece dulce, azucarado e inocente: un amor romántico que quizás no es como dicen los tópicos, sino que oculta una realidad más oscura de lo que parece. 

Y es que, en Robert, la autora aplica sus experiencias a analizar desde un punto de vista crítico el concepto del amor y a reflexionar sobre la manera en que se aprenden los conceptos del amor y el deseo. Porque quizás las mujeres aceptan, junto con esta idea del amor, unos mecanismos machistas de dominación y control que son los que dan vida al sistema patriarcal.

¿Es el amor romántico, como sugiere la autora, una especie de opio para las mujeres que las distrae mientras los hombres gobiernan? Tendréis ocasión de pensar en ello durante una representación que arranca con la confesión de un enamoramiento y continúa con un relato que rompe con el concepto convencional del amor.

Defiende el texto sobre el escenario el mismo objeto de este amor confesado por la autora: un Robert interpretado por el actor Robert González Ramírez que se encarga, así, de dar voz a las palabras de la dramaturga.

Si no tenéis miedo de ver las cosas como son y queréis descorrer el velo que nos oculta la auténtica naturaleza del amor romántico, tenéis una cita con Laia Alsina Ferrer y su montaje, Robert, en la Sala Melmac. Antes de venir, sin embargo, consultad la web de este espacio escénico del Guinardó.