Verano entre flora

Si algo caracteriza a los climas mediterráneos, esta es una marcada estacionalidad y un dilatado período de sequía estival. Durante los meses cálidos, en las regiones del mundo sometidas a este patrón climático (cuenca mediterránea, zonas de California, Chile, Australia y Sudáfrica), las altas temperaturas y la falta prolongada de agua hacen que los ecosistemas muestren adaptaciones para superar la sequía estival. Si queréis descubrir las características clave de las plantas y de muchos animales de estas regiones, no os perdáis la oferta de actividades de verano que, del 16 de julio al 4 de septiembre, propone el Jardín Botánico de Barcelona.

Una de las propuestas es Naturaleza de cerca – Insectos polinizadores, un taller familiar para observar estos animales a través de diversos instrumentos ópticos que nos permiten una visión aumentada. Esta actividad se enmarca en la exposición temporal Más que abejas. Polinizadores y flores, la vida en juego, como también lo hace el paseo autoguiado De flor en flor. La seducción vegetal. La actividad os llevará por los diversos espacios del Jardín para descubrir el magnífico mundo de las flores y a comprender la relación que existe entre su color, forma y olor con los diferentes tipos de animales polinizadores.

¡Me da vueltas la cabeza! es un juego de pistas donde tendréis que identificar cuál ha sido la planta causante del envenenamiento de un mirlo, un pájaro habitante en el Jardín. De rebote, aprenderéis varias características de las plantas del Jardín y a reconocer unas cuantas. Otra propuesta para hacer en familia de manera autónoma es la Mochila para naturalistas, un kit de materiales sorprendentes para conocer el Jardín desde diferentes miradas, a vuestro ritmo y sin prisas. Y por supuesto, durante todo el verano (y todo el año), tenéis la opción de visitar el espléndido Jardín de manera totalmente libre, sin otra guía que vuestra curiosidad y ganas de descubrir.

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