Oriol

Sauleda

Recita su poesía como un juglar con el encanto de un griot que necesita sonetos para sonar. Apuesta su juego lírico en el azar del momento y lo improvisa para llegar a puerto puntual. De vez en cuando saca algún libro. Enciende fuego con la palabra en el teatro, el rock, el tarot, la Inmaculada Concepción, por si llegan los tiempos fríos. No lo hace solo, necesita aliadas poderosas como la misma Lulú, o Núria Martínez-Vernis, Memi March, Amor Estadella, Montse Colomé y otras grandes mujeres. Con Lulú Martorell realizan unas sesiones de improvisación llamadas Concepcionals. Recientemente han activado el recuerdo y la memoria, conjuntamente con Marcel·lí Bayer, con el espectáculo Adamar Johnson, donde recuerdan al desconocido poeta fallecido en la pandemia del sida.