Guía e inmersión literaria

  • BarcelonABC. Alfabet d’una ciutat / A city alphabet
  • Jaume Subirana y Pepe Navarro
  • Ayuntamiento de Barcelona
  • Barcelona, 2013
  • 272 páginas

Barcelona no ha sido nunca tanto el centro de interés de sus habitantes como lo es ahora. Desde hace unos años, el barcelonés está redescubriendo su ciudad: los libros de historia llenan las librerías; reaparecen las fotografías de los viejos fotógrafos (Frederic Ballell, Brangulí, Forcano, Pérez de Rozas, Colom, Francesc Català-Roca, Leopoldo Pomés, Miserachs, Oriol Maspons, Colita); las exposiciones del Museu d’Història de la Ciutat, del Museu d’Art Contemporani y del Centre de Cultura Contemporània rescatan el pasado; se realizan itinerarios históricos, se nos descubre una Barcelona literaria, y la blogosfera nos muestra la Barcelona desaparecida, oculta o pintoresca, que a menudo pasa desapercibida al caminante. Y el primer sorprendido de estos descubrimientos es el propio barcelonés.

Cubiertas las primeras heridas de la Guerra Civil, la imagen de Barcelona era la de las fachadas ennegrecidas, tristes, como la larga posguerra que parecía no terminar; la de los polígonos de viviendas, que crecía desordenada bajo las luces de la “ciudad de ferias y congresos”, mientras íbamos olvidando la Barcelona luminosa de la historia bajo capas de pintura plástica y constructores sin escrúpulos.

Ahora, Barcelona es una ciudad dinámica, que ha limpiado las costras de las fachadas, que se ha abierto al mar y ha hecho crecer la hierba entre el hormigón. Pero el interés turístico la ha convertido en icónica, e incapaces de mostrarla en toda su extensión y vitalidad –lo que se llama la ciudad real–, los monumentos emergen como Sagradas Familias convertidas en hitos de un itinerario para que el turista no se pierda. Y entre los forasteros, el barcelonés se ve inmerso en esta vorágine que alimenta la ciudad y le empacha, y le da la espalda servil.

Pero el barcelonés es curioso, y en los últimos años ha aumentado su necesidad de conocer y descubrir los rincones de la historia, la suya y la de la ciudad, la que se aleja del tópico y de la postal, la que se oculta entre el ruido. No basta con sacarle el polvo al pasado. Hacía falta que alguien recuperase el interés por el relato; que al conocimiento se añadiera la mirada personal, la sensibilidad de quien sabiendo de qué habla es capaz de construir una historia y hace pasar este conocimiento por la experiencia propia y ajena, y la transmite a la manera de los cronistas.

BarcelonABC. Alfabet d’una ciutat, con textos de Jaume Subirana y fotografías de Pepe Navarro, es justamente esto de lo que estamos hablando. Un diccionario con entradas que explican los elementos importantes de la ciudad y referencias cruzadas que nos permiten viajar, como el salto del caballo en el tablero de ajedrez, a la información de otras entradas y a la construcción, a la vez, de un relato en torno a lo que es evidente y lo que no lo es tanto, pero que forma parte de la sensibilidad del autor, de la manera en que Jaume Subirana conoce y entiende la ciudad que ama.

El resultado es un paseo de la mano de la información que toda guía ha de ofrecer y a la vez una inmersión lite­raria. Como en una novela, la voz del autor, que es también el protagonista que mira, nos transporta a la ficción. Histórica y bien documentada, naturalmente, pero con la voluntad de crear ese contexto en el que el lector hace suya la historia y la recrea.

Huelga decir que BarcelonABC es una guía y un diccionario para forasteros (la edición es bilingüe en catalán e inglés), pero el indígena sabrá encontrar una manera diferente de mirar la ciudad y, en cierto modo, de construirla. Como cada partida de ajedrez, cada lectura es única. Después de leer el libro nos transformamos, del mismo modo que lo hacemos con la literatura, y nos convertimos en un barcelonés nuevo; y de cada lectura emerge una Barcelona diferente. Y Barcelona no es hasta que no la lees.

Nota

Enric H. March, filólogo y escritor, es autor del blog “Bereshit. La reconstrucció de Barcelona i altres mons”.

Enric H. March

Filólogo y autor del blog Bereshit (http://enarchenhologos.blogspot.com)

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