Barcelona pone énfasis en la atención a los niños, los adolescentes y los jóvenes en su Plan de Salud Mental, como grupos de población más vulnerables al sufrimiento y a los trastornos psicológicos. Es la única ciudad de España y una de las pocas de Europa con un proyecto de este tipo.
Silvestra Moreno Impulsó la primera Asociación de Familiares de Enfermos Mentales de Cataluña y más tarde fundó la Fundación Enfermos Mentales de Cataluña, que acaba de cumplir un cuarto de siglo de vida. En el año 2000 recibió la Creu de Sant Jordi por su lucha en defensa de los afectados por estas enfermedades.
Uno de cada cuatro barceloneses tiene un problema de salud mental. Los más comunes son la ansiedad y la depresión y, de los que requieren ingreso hospitalario, la bipolaridad y el esquizofrenia.
El sufrimiento y la enfermedad mentales incrementaron su incidencia entre 2011 y 2016, en relación con periodos anteriores. Los problemas de salud mental también afectan más a las mujeres.