Retablo de Santa Eulàlia

Según la tradición cristiana, Santa Eulàlia fue una chica de Sarrià que en el siglo IV se opuso a la persecución que había ordenado el emperador romano Diocleciano contra todos los cristianos. La fe la llevó a rebelarse contra el cónsul Daciano, quien la encarceló y la castigó hasta la muerte. La actitud de aquella chica de trece años se convirtió en un símbolo de defensa de la justicia y de la igualdad, y la veneración de los barceloneses la convirtió en patrona de la ciudad en el siglo VIII.

La festividad se celebra el día 12 de febrero, y en torno a aquella fecha el Esbart Ciutat Comtal representa cada año un espectáculo de música, canto y danza titulado Eulàlia, en homenaje a la santa y como enaltecimiento de los valores de la libertad, la solidaridad y la justicia. La escenificación parte de la recreación histórica de la vida de la joven, y muestra su martirio, su muerte y su glorificación.

También es un homenaje a la santa la elección del lugar en el que se lleva a cabo la representación: el altar mayor de la Catedral, justo encima de la cripta donde se encuentran sus restos. Intervienen doce actores que representan los soldados romanos y doce actrices que testimonian el sufrimiento del martirio. Todos juntos acompañan a las figuras de Daciano y de Santa Eulàlia.