Ou com balla

Imatge destacada

Ou com balla

Descubre aquí toda la información sobre el Corpus de Barcelona 2025.

L'ou com balla nos enseña la magia de la sencillez. Esta manifestación, propia de la fiesta del Corpus barcelonés, se ha convertido con el paso de los años en un símbolo de la identidad festiva de la ciudad.

Los elementos de L'ou com balla son el huevo, el agua y la abundancia de flores, los tres con interpretaciones simbólicas de fecundidad y regeneración, propias de la estación primaveral en plena vitalidad. Popularmente, L'ou com balla representa la Sagrada Forma dentro de una rica custodia adornada con piedras preciosas.

Es difícil precisar el origen del Ou com balla. Lo que sí sabemos con certeza es que ya existía en 1636, año en que los libros de contabilidad de la obra de la Catedral registran la compra de huevos para el surtidor en el día de Corpus y su octava. Estos gastos incluían también el encargo de engalanar la fuente del claustro, una práctica que se realizaba, como mínimo, desde 1580.

Para buscar su origen, hay que tener en cuenta muchos aspectos, empezando por toda la tradición de juegos de agua mediterráneos, como los andalusíes o eslavos, así como la simbología propia de la festividad: los huevos, el agua, las flores y las cerezas, todos ellos elementos estacionales con una fuerte carga simbólica.

La fuente del claustro de la Catedral de Barcelona y la Casa de l'Ardiaca son los lugares tradicionales donde se encuentra L'ou com balla. Actualmente se puede ver en más patios de edificios históricos y singulares de Barcelona. Este impulso del Corpus como fiesta ciudadana nos pone al alcance una serie de huevos bailarines que nos invitan a salir a la calle y a pasear por los rincones más bellos de la ciudad. El paseo de la festividad del Corpus nos permite adentrarnos en patios de ensueño: el Museo Frederic Marès, la Academia de las Buenas Letras, el Palau del Lloctinent o el Ateneo Barcelonés, por ejemplo. Ah, y no nos olvidemos de L'ou com balla del claustro de la parroquia de la Concepció, que, aunque quede apartado de este itinerario por las callejuelas de la Barcelona Vella, baila desde hace muchos Corpus.