Tocan, pellizcan y soplan cualquier objeto susceptible de ser soplado, pellizcado o tocado. Desde ruedas de bicicleta a cafeteras, desde las patas de una silla a una manguera de agua o unas canicas de jugar. Y es que estos músicos, quizás excéntricos, quizás visionarios, osados seguro, defienden que cualquier objeto que pueda ser soplado, pellizcado o tocado es capaz de hacer, no ruido, sino música y no una música cualquiera, sino buena música, muy buena. ¿Su teoría? Que la música llegó antes que los instrumentos y que, cuando no había instrumentos, cualquier cosa servía para hacer música, una música con sonoridades que los corsés nos han hecho olvidar, con posibilidades que las reglas nos han hecho abandonar. Una música más espontánea, que es la que ellos quieren recuperar y pasear.

La Orquesta Reusònica ha hecho del reciclaje el puntal de su filosofía; de la ecología, su divisa en los escenarios, y de la música, de la buena música, el eje sobre el que pivota su trinidad reusònica. “Quizás es una excentricidad musical, pero, si estos objetos no hicieran buena música, no los usaríamos porque no sería divertido”, explica este trío que, si tienen que definirse, hablan de música ecológica, quiera decir esta etiqueta lo que quiera decir... algo que ni ellos mismos acaban de tener claro.

FICHA ARTÍSTICA

Intérpretes: Rocco Papìa (guitarra de 7 cuerdas, cuerdas y percusiones "ReuSónicas", voz),  Xavi Lozano (vientos "ReuSónicos" y tradicionales, voz) y
Antonio Sánchez Barranco (percusiones "ReuSónicas" y tradicionales, voz)