¿Fusionar las artes del circo con el popular juego de la peonza? Pues sí. Así es la base de este espectáculo de carácter contemporáneo, pero con sus raíces en la cultura mediterránea.

POI responde a una búsqueda física de malabares y manipulación de materiales, pero también existe un trabajo artesanal respecto a las peonzas que el propio autor diseña y construye. Esta exploración de varios tipos de maderas, formas y puntas de apoyo han permitido la creación de peonzas personales y especiales, como, por ejemplo, una de las peonzas más grandes del mundo lanzada por una sola persona, con un peso de 45 kilos, que lanza el artista con una cuerda de más de 15 metros.