Explicar Barcelona desde otro lugar. Explicar la Barcelona castigada, la Barcelona que ha sido condenada a estar contra la pared. "Hemos querido mostrar una relación con Barcelona que es de amor y de odio, porque es la ciudad que nos acoge pero que también nos echa", explica David Teixidó esta Barcelona (contra la paret) que comparte con dos otras actrices, Clara Garcés y Sònia Espinosa, una obra de teatro con texto y dramaturgia de Lali Álvarez (quien también firmaba Ragazzo, la pieza que presentamos en el tercer circuito del Barcelona Districte Cultural) que parte de tres casos denunciados como represión policial y maltratos en las prisiones, el del 4-F (que se popularizó a partir del documental Ciutat morta), el de una mujer que se suicidó después de sufrir un primer grado de aislamiento penitenciario y las detenciones de la Operación Pandora.

"Después de ver el documental de Ciutat morta, reflexionamos sobre esta sociedad que, cuando descubre los hechos queda en ,pero que después no actúa", explica David Teixidó el motivo por el que contactaron con Lali Álvarez para crear esta pieza de teatro que fue creciendo mientras se iban informando otros casos y que fueron tejiendo en sesiones de improvisación que después Lali Álvarez dotaba de dramaturgia y fijaba en el papel. Fue entonces cuando decidieron que no querían subir al escenario, que querían romper la cuarta pared que les separaba del espectador "para conseguir que el impacto de aquello que les explicábamos fuera más fuerte".

"Siempre nos habíamos planteado si el papel pasivo del espectador era útil y si no era mejor intentar buscarle otro. A la vez que investigábamos sobre la temática también hacíamos una investigación teatral y decidimos que esta historia la queríamos explicar muy cerca de los espectadores, que nos pudieran oír respirar, que nos pudieran mirar a los ojos", explica David Teixidó las razones por las que Barcelona (contra la paret) se plantea como una fiesta, con público y actores compartiendo espacio. "Estamos tan cerca de ellos y la interpretación es tan hiperrealista que, a veces, los espectadores incluso se sienten interpelados", añade el actor.

Los casos de violencia y represión que inspiran Barcelona (contra la paret) son, explica Teixidó, eso: fuente de inspiración para a partir de ellos construir una ficción. "No escondemos que hablamos de ellos, pero tampoco les ponemos nombres. Hay gente, que si conoce los casos previamente, los identificará. Hay quien no lo hará. Pero no es necesario, no necesitamos que nuestro público venga informado", apunta el actor quien también reconoce que han buscado "universalitzar" las historias y dotarlas de una poética que ayude al público a conectar con ellas.