¿Pueden un violoncelista y un lanzador de cuchillos convertirse en pareja de baile? ¿Tienen algo que decirse? ¿Sonará la música de los cuchillos igual que la del instrumento de cuerda? Domichovsky y Agranov han conseguido sumar en un espectáculo de título que parece imposible, Davaiii, y que ahora ellos nos explican.

- ¿Qué tienen en común un lanzador de cuchillos y un músico?

Cada uno busca lo suyo en el lugar del otro y aprendemos cada uno de la manera de trabajar del otro, de la música que producen los cuchillos y la satisfacción que uno percibe cuando se clava una nota.

- ¿Como os conocéis y cómo empezáis a trabajar juntos?

Nos conocemos durante la creación de un circo de invierno del Masnou junto a otros dos artistas en el año 2016. Estos últimos se han vuelto a vivir a Argentina y decidimos continuar como dúo.

- ¿Qué quiere decir Davaiii y por qué esta palabra como título de vuestro espectáculo?

Davai significa vamos en ruso, y es el motor de estos dos personajes que siempre intentan seguir adelante, jugando con los imprevistos que les pone la vida.

- ¿Cómo habéis trabajado el espectáculo? ¿Cómo lo habéis ido construyendo?

Hemos ido creando material buscando en los rituales/mitos que se llevan las familias (propias y ajenas) cuando emigran a otro país, llevando consigo de esta manera una parte que siempre se mantiene sin importar el lugar donde vivas. Ambos somos emigrantes e hijos de emigrantes. Por esas casualidades de la vida, nuestros antepasados salieron de Rusia y nuestros caminos se cruzaron en Barcelona. De todas estas historias salió el material, de alguna manera.

- ¿A qué público creéis que va dirigido Davaiii?

Es un espectáculo para todos los públicos

- ¿Creéis que el circo tiene que buscar, como vosotros hacéis, nuevos lenguajes?

Creemos que cada uno tiene que buscar su propio lenguaje, no creemos que haya una manera de hacer que sea la correcta.