Proyectada por encargo del abogado y terrateniente Manuel Llopis Bofill, la casa que lleva su nombre es una magnífica residencia modernista construida entre los años 1902 y 1903. A diferencia de otros arquitectos coetáneos, Gallissà descartó para la fachada el estilo neogótico que imperaba en la época y se decantó por los elementos orientalistas.
Construcción singular
La ubicación de la Casa Llopis Bofill en un chaflán obligó al arquitecto a distribuir los elementos de la fachada de manera poco ortodoxa: en el centro, una banda vertical con tribunas divide la fachada en dos partes simétricas y, en los laterales, una columna de tribunas remata cada uno de los dos vértices. Con respecto a los materiales, Gallissà prefirió el ladrillo y el estuco a la piedra tradicional, y los combinó con hierro, cerámica y cristal. El aspecto actual de la casa es muy parecido al original, a pesar de las obras que se hicieron para arreglar los daños causados por la Guerra Civil.
En busca de una arquitectura nacional
Coincidiendo con muchos arquitectos e intelectuales de la época, Gallissà creía que había que encontrar un estilo nacional que transmitiera el espíritu de Cataluña, del modo en que lo había planteado Lluís Domènech i Montaner en su famoso ensayo En busca de una arquitectura nacional.
Patrimonio cultural
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Eixample
la Dreta de l'Eixample
- Dirección:
- Bailèn, 113
- Districte:
- Eixample
- Barrio:
- la Dreta de l'Eixample
- Ciudad:
- Barcelona
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