Una fiesta para descubrir, experimentar y vivir la ciencia
La Fiesta de la Ciencia es una gran celebración colectiva del conocimiento, la investigación y la innovación que llena la ciudad de curiosidad, descubrimientos y experiencias inolvidables. Organizada por el Departamento de Ciencia e Innovación del Ayuntamiento de Barcelona, se celebra anualmente desde hace dieciocho ediciones con el objetivo de acercar la ciencia a toda la ciudadanía, de una manera comprensible, lúdica y participativa.
Durante un fin de semana, Barcelona se transforma en un gran espacio de encuentro entre la comunidad científica y el público, donde pequeños y mayores pueden experimentar, preguntar, observar y entender mejor el mundo que nos rodea. Talleres interactivos, espectáculos, rutas, demostraciones en directo, experimentos, charlas, juegos, instalaciones y mucho más forman parte de una programación diversa que invita a descubrir la ciencia desde múltiples perspectivas y disciplinas.
La Fiesta es también un escaparate del talento y la investigación que se desarrolla en Barcelona y su entorno. Participan centros de investigación, universidades, entidades, instituciones y profesionales que comparten sus conocimientos de forma cercana y entusiasta. Una ocasión única para poner rostro a la ciencia, romper estereotipos y fomentar vocaciones científicas desde la infancia.
Con una vocación abierta e inclusiva, la Fiesta de la Ciencia quiere hacer llegar el conocimiento científico a todos los rincones de la ciudad y a todo tipo de públicos, poniendo especial atención a la diversidad y a la igualdad de oportunidades. Porque la ciencia es una herramienta clave para afrontar los grandes retos sociales y ambientales de nuestro tiempo, y solo si la impulsamos de manera compartida podremos avanzar hacia un futuro más justo, sostenible e informado.
Participar en la Fiesta de la Ciencia es disfrutar, sorprenderse, aprender y mirar el mundo con otros ojos. Es celebrar el papel fundamental de la ciencia en la sociedad y reivindicar su acceso universal. Porque la ciencia también es una fiesta. Y es, sin duda, para todo el mundo.