“El Festival Grec puede hacer que toda Barcelona sueñe despierta”

Cartel del Grec Festival 2025 © CODEA

Entrevista a Mònica Casamor (Codea Studio)

Más allá de la programación, el cartel de un festival también cuenta historias. Suele ser más que un simple reclamo: una declaración de intenciones y una puerta de entrada al universo artístico. Coincidiendo con la reciente presentación de la imagen del Grec 2025, conversamos con la directora creativa de la propuesta gráfica, Mònica Casamor, de la agencia CODEA, para que nos explique qué hay detrás del proceso creativo de esta campaña que pronto llenará las calles de Barcelona.

Cuéntanos el concepto “sueño lúcido de las artes vivas” que hay detrás del cartel. ¿Cómo nace y en qué consiste?
Ver un espectáculo es como soñar despiertos: un momento de conexión colectiva a través de un escenario. Si un espectáculo hace que un grupo de gente sueñe despierto, el Festival Grec podría hacer que toda la ciudad de Barcelona viviera esta especie de sueño lúcido de las artes vivas.

La idea surgió al empezar a pensar en la experiencia del público viendo una historia y en la atmósfera onírica que se genera y que trasciende la cotidianidad. Partiendo de la caída de la noche y El sueño de una noche de verano de Shakespeare, imaginamos un mundo donde las cosas pueden coger otras lógicas y quisimos crear esta Barcelona figurada, inspirada en los escenarios de teatro, y ligar esta idea con los elementos de la ciudad, transformándolos. 

Así, reproducimos diferentes partes de la ciudad: el teatro griego, los teatros de la ciudad, o monumentos, como el Arco de Triunfo. El fauno encarna un ser travieso que aparece y desaparece por los rincones de Barcelona jugando con el paisaje urbano. Utiliza el Arco de Triunfo como un instrumento, juega en el teatro griego con la mano como si fuera una persona interpretando y, en el caso del teatro, acciona una chimenea del Poble-sec como un interruptor que da luz a la calle.

¿Con qué premisas habéis trabajado la campaña gráfica?
Este año es la 49.ª edición del festival, un punto de inflexión, ya que es la previa al 50.º aniversario, y hay un cambio de dirección. No queríamos perder la esencia del festival, pero sí reflejar su transformación. 

Hemos intentado deslocalizar y ampliar la idea del festival, que no solo se produce en el teatro de Montjuïc, sino en muchísimos lugares de la ciudad a la vez. Toda Barcelona se convierte en el escenario. Esto nos ha llevado a teatralizar la ciudad. Hemos tratado de transmitir la idea de ciudad festival y hacer notar la presencia del festival por todas partes, tiñendo las calles con pósteres y banderines.

Queríamos que fuera una campaña gráfica que animara, que invitara a asistir al festival, y que no se dirigiera solo al público experto, sino que llegara y despertara a toda la ciudadanía. 

Hay tres carteles, uno de los cuales es el principal, ¿verdad?
Se trata de una serie que presenta a un personaje, que es el fauno, en diferentes espacios de la ciudad. Hemos perseguido la idea de coralidad tanto a nivel formal como en cuanto a las localizaciones. En cuanto a la gráfica, nos hemos inventado este sistema de bandas multicolor, bastante llamativo, que se combina de diferentes maneras. 

Recuperáis el mito del fauno. ¿Surgió entre una variedad de propuestas o ya lo teníais claro desde un inicio?
Es uno de los iconos del Grec. Pensamos que era un posible hilo desde el que estirar. No era obligatorio recuperarlo, pero a medida que se fue materializando la idea creativa, lo quisimos rescatar. Como se trata de un ser medio mitológico, pero reinterpretado, nos ayudaba mucho a crear una figura que referenciara el festival, sin problemas de representación. Generaba una presencia humana, pero abstracta.

El fauno apareció en 1986 de la mano del pintor y grafista Peret, y últimamente se hacía presente a través de la E de GREC.
Analizando toda la trayectoria, desde los inicios de los años noventa hasta ahora, se puede ver que en cada edición se ha representado de diferentes maneras: más gráfico, simbólico, en tipografía, como ilustración, etc. Nosotros, de momento, hemos rescatado el fauno para quedarse. Lo hemos hecho de carne y hueso y lo hemos convertido en protagonista.

Habrá quien lo entienda, y quizá otros verán a una persona joven jugando con maquetas. Así también funciona. La virtud de este tipo de festivales y de campañas es que permiten incorporar muchas licencias, ser flexibles. Que cada artista o estudio pueda hacer su propia interpretación. 

Háblanos de la herencia gráfica que habéis recibido. ¿La habéis tenido en cuenta para no repetiros o bien para inspiraros?
Durante mucho tiempo, el festival había seguido una rotulación estricta que se había mantenido. En los últimos años, sin embargo, las propuestas han sido más diversas. Ha habido dos años de ilustraciones, la rotulación de los cuernos había mutado y se había transformado en otra tipografía… En nuestro caso, hemos querido hacer un cartel sorprendente y, a la vez, que pueda marcar un precedente y convertirse en una imagen a medio-largo plazo del festival.

Es la primera vez que habéis creado la imagen del Grec. ¿Qué ha significado para la agencia? ¿En qué otras campañas relevantes habéis participado?
Sí, es nuestro primer año en el Grec. Haber hecho esta campaña es un paso importante y hemos disfrutado mucho del proceso. Las campañas culturales son una de nuestras fortalezas. Hasta ahora hemos hecho campañas para la Sala Beckett, así como para diferentes iniciativas del Ayuntamiento de Barcelona (“Superilles”, “El Futuro ya es Presente”), para el Departamento de Salud de la Generalitat (prevención del suicidio) y para marcas internacionales (PUMA), entre otros.

SIGUE LEYENDO: ¿Cuántos nombres ha tenido el Grec? y El brazo de Sergi

Comparte este contenido