La reforma de la plaza de la Gardunya, convertida en monumento a través de fotografías

Un nuevo monumento en la plaza de la Gardunya, en el Raval, retrata la reforma de este espacio a través de las fotografías de la exposición “Ángeles nuevos”, que se presentó en La Virreina Centro de la Imagen en el año 2019. Las instantáneas decoran las entradas de los edificios de viviendas, el Mercado de la Boqueria y la Escuela Massana.

12/03/2021 14:34 h

Ajuntament de Barcelona

En los últimos años, la plaza de la Gardunya ha experimentado una reforma profunda: un proceso de transformación que poco a poco ha ido tomando forma y que fue inmortalizado por el fotógrafo e investigador Jorge Ribalta. De este proceso de documentación nació, en el 2019, la exposición «Ángeles nuevos. Escenas de la reforma de la plaza de la Gardunya, Barcelona 2005-2018», que se presentó en La Virreina Centro de la Imagen.

Los trece años de intervenciones urbanísticas de la plaza de la Gardunya se recogieron en la exposición, desde las primeras demoliciones hasta la llegada de los habitantes de los pisos protegidos que se han construido, pasando por el soterramiento del aparcamiento y la construcción de la Escuela Massana.

El resultado de la exposición llevó al vecindario a organizarse en la plataforma #veïnsgardunya para pedir que parte del material fotográfico se mantuviera en exposición permanente en las zonas comunes de las viviendas. La propuesta fue bien recibida y se ha extendido no solo a los accesos de las viviendas, sino también al Mercado de la Boqueria y la Escuela Massana.

Un viaje interactivo por la memoria de la plaza de la Gardunya

El conjunto monumental une la función decorativa con la documentación histórica, a través de un hilo narrativo que explica la historia del lugar. Para acceder a toda la información, documentos, monumentos y ruinas, en torno al friso se han instalado una serie de códigos QR y, por medio del dispositivo móvil, se accede a un mapa interactivo que muestra diferentes aspectos de la historia del lugar.

El monumento que ahora se muestra al público tiene la posibilidad de crecer y modificarse en el futuro, ya que la reforma de la plaza todavía no se ha terminado. Faltan un acceso al patio del antiguo hospital y la reforma de los jardines del Doctor Fleming.

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