Hasta ahora, también se ha recuperado más de la mitad de los arbustos perdidos por la sequía y hasta finales de año se habrán recuperado 4,3 hectáreas de céspedes. Durante este mes de noviembre también se plantará flor de temporada en un total de 1.697 metros cuadrados, con más de 31.000 flores de temporada nuevas. El plan de recuperación del verde afectado durante la sequía seguirá desarrollándose hasta la primavera del año que viene, acompañando siempre los ciclos del verde y plantando en el mejor momento para garantizar la supervivencia de las especies. En total, la previsión es llegar a 7.500 árboles y 8,2 hectáreas de planta arbustiva y vivaz.

Actuaciones de poda, revisión y mejora

Durante el otoño también se ejecutan tareas de la campaña de poda y se prevé actuar en 5.300 árboles hasta finales de año, con los trabajos del último trimestre del año centrados en el arbolado vial. Se trata de las actuaciones necesarias de mantenimiento del arbolado, siempre respetando la biología y la estructura del árbol, y que permiten eliminar ramas secas, con riesgo de sufrir fracturas, o las que se dirigen hacia las fachadas.

De forma paralela a la campaña de plantación de otoño, continúan las obras por mejorar diferentes espacios verdes, se sustituye el verde estropeado y se incorporan especies con menos necesidades hídricas, se mejora el sistema de riego para hacerlo más eficiente y sostenible y se renuevan algunos de los parterres y pavimentos. Con respecto a las revisiones previstas en el Plan de riesgo del arbolado, las tareas de este año están prácticamente acabadas, eso quiere decir que durante el 2025 se han revisado unos 120.000 ejemplares de árboles, la mitad del arbolado de la ciudad.