Invocar a una deidad tras una enfermedad propia o de un ser querido, o ante una dificultad, ha sido una práctica común a lo largo del tiempo y en diversas culturas y religiones, incluida la cristiana. Hay diferentes formas de pedir un favor o agradecerlo, pero muchas veces se materializan en una visita al santuario de la imagen devota y la donación de una presentación que explique el favor solicitado u obtenido.

Entre la amplia colección de exvotos del Museo, cabe destacar el conjunto de 11 exvotos pintados sobre sencillas tablas de madera, 8 de los cuales parecen proceder del santuario de Nuestra Señora de los Milagros, en la Cataluña central. Decoradas de forma sencilla y popular, generalmente están presididas por la imagen religiosa del ángulo superior izquierdo y narran sintéticamente el episodio que motivó el agradecimiento o la exigencia de un favor: un accidente, un conflicto bélico, un naufragio, un nacimiento o una enfermedad.