El 28 de noviembre de 2020 se abre nuevamente al público. Sala de diversión , un espacio de referencia de la antiguo mundo del ocio y la diversión en Barcelona. , que se puede visitar en su ubicación actual desde 1981. Con esta reapertura, recuperamos y actualizamos un espacio museístico de la ciudad; un patrimonio que seguramente cautivará al público de todas las edades y evocará el pasado a través de las emociones y la curiosidad que despiertan los objetos expuestos.

La Sala de Entretenimiento es la última del Gabinete del Coleccionista, la única situada en la tercera planta del edificio y, por tanto, la sala con la que el visitante finaliza su recorrido por el Museo. El título de la nueva presentación ya nos deja entrever su situación, al mismo tiempo que nos transporta a ese espacio de casas y edificios antiguos donde muchas veces se guardaban objetos en desuso: '¿Quieres subir al desván del Museo?' Bajo este lema, objetos y androminas entrañables, abandonados y olvidados que pertenecieron a nuestros antepasados ​​ahora cobran vida a través de nuestra mirada actual y desde una colocación en escena adecuada.

Las diversas intervenciones y mejoras de las condiciones expositivas que se han llevado a cabo en otras salas del Gabinete del Coleccionista se han realizado respetando el estrecho vínculo entre las piezas y su marco expositivo, es decir, entre el contenido y el continente, lo que conforma una museografía muy personal ideada por Frederic Marès. 

Partiendo de esta premisa, se pretende que la Sala de les divers pase a formar parte del imaginario de todos aquellos que se acerquen a visitar el Museo, haciendo de la visita una experiencia única y diferente que perdure en la memoria. La nueva museografía de la sala, diseñada para potenciar una lectura emocional de las colecciones, llegará directamente al corazón de los visitantes y generará en ellos un impacto a partir de los recuerdos y sentimientos que evocan.

Por eso te invita a redescubrirlos. colecciones tan singulares que conforman la Sala de les divers y tan íntimamente ligados a quien los hizo posibles: Frederic Marès, escultor y el mayor coleccionista catalán del siglo XX. Y no podemos olvidar que la principal intención sobre la que se ha proyectado esta nueva presentación es la de prevalecer y mejorar, en la medida de lo posible, la idea original de Marès de concebir un 'museo sentimental'.