La plaza arrastraba un problema de falta de actividad y vida pública, en parte por el mal uso del espacio debido a la suciedad causada por la frecuentación de perros, su poca visibilidad y la degradación del mobiliario urbano. Con la remodelación, la plaza de la Vidriera se convierte en un espacio público de calidad pensado para el uso y disfrute de todas las personas del barrio, en especial los niños y niñas, las familias y las personas mayores. A la nueva configuración del espacio, de cerca de 2.300 m², se incorporan nuevos elementos tanto de juego como de estancia para dar vida y un uso más adecuado a la plaza, y además se resuelven los problemas de erosión de los parterres y de drenaje de aguas.

La actuación ha consistido en colocar unos nuevos muretes para delimitar los parterres, que han nivelado también las diferencias de cota existentes. El mobiliario era obsoleto y se ha sustituido por uno nuevo que se ubica en el perímetro de la plaza: hay bancos de madera tropical FSC con respaldo y apoyabrazos, chaises longues, bancos accesibles con elementos delimitadores de madera, bancos sin respaldo con elementos delimitadores, y papeleras.

En la zona central se ha incorporado un pavimento de caucho con un ligero desnivel que facilita la creación de un área accesible. La zona de juegos se ha renovado y ampliado con elementos que ahora responden a los requisitos del Plan del juego de Barcelona, con las indicaciones del Instituto Municipal de Parques y Jardines e incorporando también las demandas de la comunidad educativa de la Escuela Gayarre, que está junto a la plaza. Los niños y niñas usuarios de esta nueva área de juegos podrán deslizarse por un tobogán, escalar con diferentes formas de interacción, elementos asideros y tipos de pendientes, o mecerse en una hamaca accesible, entre otras acciones.

Con respecto a la vegetación, las actuales restricciones de sequía no permiten plantar. Cuando la situación mejore y se den las condiciones adecuadas, el proyecto de renaturalización consistirá en mejorar la plantación de los parterres perimetrales con arbustos de menor altura y especies de variedades autóctonas, que requieren menor gasto de agua. En los alcorques de los árboles que ya había en la plaza se plantarán especies que favorezcan la biodiversidad a fin de aumentar la fauna útil para combatir plagas y enfermedades, y suficientemente rústicas para soportar la presión del entorno urbano.

La pavimentación es de sablón en el área central, de revestimiento continuo de árido natural en el área intermedia, de piedra natural arenisca en el área perimetral, y de caucho en el área de juegos infantiles.

La renovada plaza de la Vidriera se inaugura el jueves 1 de febrero, a las 16.00 h. Aquel día habrá también varios juegos tradicionales, talleres de circo y una merienda.