Origen de las colecciones

Las colecciones del Museu Etnològic i de Cultures del Món son de una gran diversidad de procedencias, materiales y usos. Una diversidad patrimonial generada por la actividad humana en todas sus vertientes: el mundo simbólico, el trabajo, la vida privada, el espacio doméstico o la actividad social.

Como museo sujeto a la disciplina antropológica, esta gran diversidad patrimonial nos permite utilizar una herramienta fundamental para la etnología: la comparación entre grupos sociales y culturales. Esta comparación, realizada desde los objetos o los soportes audiovisuales, requiere una documentación exhaustiva y sistemática a partir del trabajo de campo.

Por esta razón, desde los orígenes del Museu Etnològic, la investigación y el trabajo de campo se han considerado labores imprescindibles para profundizar y mejorar el conocimiento de las colecciones, sin olvidar el patrimonio etnológico contemporáneo, el de antes y el de ahora, que permite la conexión del museo con la sociedad que le rodea, para captar, de este modo, su transformación constante. En este sentido, la documentación, la investigación y el contacto con los lugares de origen de los objetos de la colección —desde los más lejanos hasta los más próximos, como puede ser la propia ciudad de Barcelona— han sido y son una de las misiones del museo.

Las campañas y los viajes

Las campañas y los viajes

Desde la creación de los museos que han llevado al actual Museu Etnològic i de Cultures del Món, se han ido sucediendo diversos viajes y campañas de recolección.

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Protagonistas

Protagonistas

El origen principal de las colecciones son las campañas y expediciones etnoantropológicas llevadas a cabo, hasta finales de la década de 1960, tanto por el personal del museo como por otras personalidades vinculadas a la institución, como el escultor Eudald Serra o el coleccionista Albert Folch.

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