‘Arqueologia a l’exili’: cómo el Museo de Arqueología protegió nuestro patrimonio

No hay duda de que la guerra civil española, del 1936 al 1939, fue uno de los episodios más trágicos y dolorosos de la historia reciente, y comportó cambios políticos, sociales y económicos que aún permanecen. Este conflicto bélico no solo se llevó muchas vidas, sino que también significó el final de muchos proyectos culturales vinculados a la conservación y difusión del patrimonio del país. Grandes museos vieron cómo debían cesar su actividad e, incluso, proteger las obras de arte que había dentro. Uno de ellos fue el Museo de Arqueología de Cataluña, que vivió unos años muy difíciles, hasta el punto de tener que evacuar buena parte de sus colecciones a Suiza para garantizar su integridad. Para explicar esta etapa de la que se ha hablado poco, el centro abre la exposición "Arqueologia a l’exili. El Museu d’Arqueologia de Catalunya i la Guerra Civil espanyola (1936-1939)".

La exposición relata la historia desde que se inauguró el museo en 1935 hasta que se cambió la dirección del centro al terminarse la Guerra Civil en 1939 en favor del bando franquista. También podremos ver cómo se conservaron las obras durante la guerra, tanto en refugios como en una remota localización del Alt Empordà. Aparte, podremos conocer cómo fue el proceso de negociación por parte del Gobierno de la República y la Generalitat para trasladar las piezas en Ginebra. La exposición "Arqueologia a l’exili" estará abierta del 25 de abril al 6 de octubre, de martes a domingo, en el Museo de Arqueología de Cataluña, en Montjuïc.

Las entradas para el centro tienen un precio de 5,5 euros y se pueden adquirir en las taquillas. Encontraréis más información en el sitio web del museo.