Videojuegos ‘made in Catalonia’

Hasta el 4 de septiembre, el Palau Robert presenta la primera gran exposición dedicada a la industria del videojuego en Cataluña. Se titula Nueva Pantalla y está organizada por la Dirección General de Difusión de la Generalitat.

La muestra pone en valor todos los satélites que giran en torno al universo del videojuego: el entretenimiento, naturalmente, pero también la creación artística, la economía y las finanzas, los estudios universitarios y los ciclos formativos, la industria, la tecnología y tantos otros aspectos socioculturales que hacen de ella un entorno extremadamente estimulante e importante para el país.

Según los últimos datos, en Cataluña hay 167 estudios de videojuegos que emplean a más de 3.000 profesionales: programadores, animadores, guionistas, artistas visuales, diseñadores de la experiencia de juego, músicos, ingenieros de sonido, controladores de calidad, pero también streamers y youtubers. Con una facturación anual que ronda los 500 millones de euros, la industria catalana lidera el sector en España –donde representa el 51 % del total– y se ha convertido en uno de los polos de creación más importantes de Europa, especialmente destinado al móvil.

La exposición explica las diferentes manifestaciones de este diálogo entre los videojugadores, como los medios de comunicación, los creadores de contenido, las ferias y las redes sociales. Para ello, Nueva Pantalla invita a los visitantes a sumergirse en este mundo a través de instalaciones inmersivas, contenidos interactivos y juegos, como Endling, Narita Boy, Arise: A simple story o Koral. La exposición tiene un claro carácter divulgativo y lúdico con el fin de llegar tanto a aficionados como a todas aquellas personas que nunca se han acercado al medio interactivo. También hay un apartado dedicado a los serious games, que utilizan el lenguaje videolúdico como medio con fines educativos o de investigación.

Comisariada por los periodistas Joan B. Galí, Albert García y Marc Angrill, Nueva Pantalla aborda el ecosistema de los videojuegos como algo social con raíces en los años 80 que genera toda una comunidad a su alrededor, a la vez que los reivindica como artefacto cultural de interés artístico. Por eso, a la inauguración asistió la consellera de Cultura, Natàlia Garriga, y entre sus contenidos cuenta con un espectacular y evocador vídeo inmersivo creado expresamente para la ocasión.