La gran novela de Caterina Albert, en el escenario del TNC

¿Cómo trasladar al escenario las páginas de una de las novelas más conocidas de la literatura catalana y publicada en 1904, manteniendo el clima, la esencia y sin que decepcione a aquellos a quienes el libro les parece fascinante? Seguramente este ha sido uno de los retos de quien se ha encargado de la dramaturgia de Solitud, Albert Arribas, y de la directora del montaje, Alícia Gorina. La obra se estrenará en la Sala Petita del Teatre Nacional de Catalunya (TNC) el 5 de marzo y permanecerá allí un mes, hasta el 5 de abril, con un reparto formado por Maria Ribera, Pol López, Pau Vinyals, Pepo Blasco, Adriana Parra, Ona Grau, Oriol Guinart, Laura Luna y Adrià Salazar.

Como muchos sabréis, Solitud es la gran novela de Caterina Albert, escritora que firmaba sus libros con el seudónimo de Víctor Català. La autora supo construir uno de los personajes femeninos más celebrados de la literatura catalana, la Mila. La historia está ambientada en una ermita de una montaña solitaria y abrupta. Es una novela enmarcada dentro del movimiento modernista, que escapa del realismo descriptivo y transforma elementos de la realidad en símbolos. Para la directora de la obra, Solitud "es un viaje, es el viaje de la Mila —el de su deseo— hasta convertirse en una persona autoconsciente, hasta encontrar la libertad personal en la soledad real pero elegida".

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