El principio básico de todos ellos es no dejar a nadie atrás, poniendo fin a la pobreza, protegiendo el planeta y garantizando que todas las personas disfruten de paz y prosperidad en 2030.

Para concretar y localizar las metas de la Agenda 2030 se han adaptado a la realidad local y metropolitana el 82% de los ODS globales y se ha definido un conjunto de más de 220 indicadores para controlar la implementación de esta hoja de ruta local . Para alcanzar los objetivos, serán necesarias la complicidad y las alianzas con los agentes de la ciudad.

Algunos de los hitos son las siguientes:

• Reducir la prevalencia de la privación alimentaria a menos del 0,5% de la población.
• Situar la tasa de mortalidad derivada de enfermedades infecciosas y parasitarias por debajo de 8 y su tasa de morbilidad por debajo de un valor por determinar.
• Situar la tasa anual de prevalencia de la violencia machista por debajo del 5% y el número de feminicidios a cero.
• Situar el paro registrado por debajo de las 70.000 personas, situando la tasa de pobreza laboral por debajo del 10% y situar la brecha salarial de género a cero, y conseguir que más de 1.000 personas con discapacidad sean contratadas cada año a través de la Red Barcelona para la Inclusión Laboral.

Las metas han sido validadas por el Consejo Académico Asesor, que agrupa personalidades de reconocido prestigio en el ámbito académico, y ahora se creará una mesa de seguimiento con actores de la ciudad para impulsar su consecución.

El compromiso de la ciudad con la Agenda 2030 se explicitó en el Pleno del 30 de septiembre de 2019 con una declaración institucional suscrita por todos los grupos. Para hacerlo realidad, una comisión transversal ha elaborado este documento que une rigor técnico y compromiso político y que está alineado con el Plan de Actuación Municipal (PAM) y el Plan de Inversiones Municipal (PIM).

Puede consultar el documento con todos los objetivos y metas aquí (en catalán).