Urbanismo orgánico

Barcelona ha pasado por varios modelos de ciudad a lo largo de su historia. Las condiciones sociales, poblacionales, el progreso, la política y muchos otros factores han impulsado la evolución del entramado urbano, que como un ser vivo, se ha tenido que adaptar al entorno para sobrevivir. Desde su estructura y organización actual, resultante de siglos de crecimiento y transformaciones, Barcelona adopta un modelo que tiende a conciliar la calidad de vida de la ciudadanía con la sostenibilidad y la conservación del medio ambiente. Para dar a conocer las actuaciones urbanísticas que se están realizando en esta línea, La Fábrica del Sol ha organizado el ciclo de actividades Urbanismo orgánico, del 17 de octubre al 8 de noviembre.

La planificación de una ciudad tiene un impacto directo en la calidad de vida de las personas que viven en ella. La gestión del tiempo, la movilidad, la salud, la inclusión social o la práctica del ocio pueden verse condicionadas. En esta línea, el ciclo dedica la primera sesión a mostrar planificaciones diferentes de Barcelona a lo largo de su historia y de qué modo estas han influido en la salud pública.

Otras actividades muestran ejemplos de las acciones que se están tomando para una mayor integración de la ciudad con el entorno natural y mitigar su contribución en fenómenos de alcance global como el cambio climático. Es el caso de un paseo por el Park Güell, con la atención puesta en el vínculo de la arquitectura de Antoni Gaudí y la naturaleza, o el itinerario por el parque de la Trinitat Vella, para conocer diversas medidas que favorecen la filtración de agua , la accesibilidad o la amortiguación del ruido del tráfico motorizado. Asimismo, una visita al impresionante depósito de agua del Parque Joan Miró muestra su papel relevante frente a episodios de lluvias torrenciales, que en un escenario de cambio climático se pronostican con una mayor frecuencia y severidad.

El ciclo concluye con una merienda, unos diálogos y otras actividades en la supermanzana del Poblenou, la primera que se implantó en Barcelona, en el año 2016. Este espacio urbano pacificado pone de relieve la mayor atención en las personas y su bienestar del modelo urbanístico por el que apuesta la ciudad. Una ocasión para conocer y vivir in situ las ventajas de estos espacios.

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