Los rincones más desconocidos del Teatro Nacional de Cataluña

Desde este mes de enero existe la opción de conocer en profundidad las instalaciones del Teatro Nacional de Cataluña a través de las visitas guiadas que tienen lugar cada miércoles y cada jueves a las 11 h y a las 12.30 h. Unos itinerarios por el interior del edificio proyectado por el arquitecto Ricardo Bofill que permiten a las personas inscritas descubrir rincones solo conocidos por los artistas y por el personal del teatro, como pueden ser los camerinos, los almacenes, las salas de ensayo, los talleres y, en definitiva, todo lo que hay detrás de los escenarios. Además, la visita, que tiene una duración aproximada de una hora, también pasa por el vestíbulo y las diferentes salas en las que tienen lugar las representaciones. Para participar en alguna de las visitas programadas, hay que realizar la inscripción a través del correo electrónico visites@tnc.cat.

El Teatro Nacional de Cataluña se empezó a construir el 8 de noviembre de 1991 en unos terrenos cedidos por el Ayuntamiento de Barcelona. El edificio principal destaca por su aspecto de templo griego, con un techo a dos aguas apoyado sobre 26 columnas de 12 metros de altura. En su interior se encuentra la sala grande, con capacidad para cerca de 900 espectadores, y la pequeña, con la mitad de aforo. También tiene un amplio vestíbulo, una zona para los artistas, oficinas y servicios complementarios. El complejo teatral dispone de un segundo edificio de 5.000 metros cuadrados donde están los talleres y una sala polivalente para todo tipo de espectáculos.

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