Desde el año 2016, el Plan de pinturas ha dignificado 100 centros educativos con una inversión municipal de 10.602.288 euros, que ha beneficiado a más de 33.500 alumnos. Se trata de dignificar los edificios escolares como equipamientos públicos importantes para la ciudad, tanto por los usos educativos en horario lectivo como para usos sociales y comunitarios, y establecer unos parámetros cromáticos que se empiecen a aplicar a todos los centros donde se actúe. Éste 2020, se intervendrá en un mínimo de 19 centros: 16 durante el verano y el resto a partir de octubre hasta finales de año. Por este primer periodo, el Plan se desarrolla en dos escuelas de Sants-Montjuïc: la Gayarre y la Mosén Jacinto Verdaguer.

Este programa se ha diseñado eludiendo los colores estridentes, habitualmente asociados a espacios infantiles, para dar protagonismo a los materiales, las texturas y el aprovechamiento de la luz natural y artificial para acentuar la serenidad y el confort. Durante el proceso, las propuestas son trabajadas y consensuadas con la dirección de los centros. A partir de los elementos del edificio con un color determinado (maderas, pavimentos, revestimientos cerámicos…), se propone por cada centro educativo una gama cromática cálida. Las propuestas respetan las singularidades de cada base arquitectónica e introducen variaciones en función de la estructura y características del edificio.

El Plan ha estado finalista de los premios FAD de arquitectura e interiorismo los años 2019 y 2020, por utilizar los colores para conseguir una mejora de la sensación de amplitud, serenidad y luminosidad de los espacios, que los hacen más motivadores y facilitadores del aprendizaje.