En 1747, Johann Sebastian Bach visitó al rey Federico II de Prusia, que también era compositor y flautista. En la residencia del monarca, después de ofrecerle probar todos los teclados de la corte, este le pidió que improvisara una fuga a partir de un tema suyo, y así lo hizo. Cuando Bach regresó a Leipzig, siguió trabajando hasta dar forma a su Ofrenda musical, una colección de piezas que ponen de manifiesto su dominio incomparable del arte del contrapunto.
Ton Koopman dirigirá la orquesta que él mismo fundó en 1979, la Orquesta Barroca de Ámsterdam. Fascinado por los instrumentos antiguos, Koopman es también organista y clavecinista y ha tocado los instrumentos históricos más importantes de Europa. Ha colaborado como director invitado con las orquestas más destacadas del mundo y es miembro honorífico de la Real Academia de Música de Londres.
La Orquesta Barroca de Ámsterdam está formada por especialistas barrocos de renombre internacional. Entre 1994 y el 2004 realizó uno de los proyectos discográficos más ambiciosos de las últimas décadas: la grabación integral de las cantatas sacras y profanas de J. S. Bach.

La pianista francesa Hélène Grimaud fue aceptada en el Conservatorio de París a los 13 años y ganó el premio de interpretación solo tres años después. Alumna de György Sándor y Leon Feisher, dio su recital de debut en 1987 en Tokio. Ese mismo año, Daniel Barenboim la invitó a actuar con la Orquesta de París, hecho que le dio el empuje definitivo a su carrera musical.
Aparte de sus conciertos con las orquestas y directores más importantes del mundo, Hélène Grimaud es una artista comprometida, miembro de la organización Musicians for Human Rights y defensora del medio ambiente y los animales en peligro de extinción.
En su visita a Barcelona, nos ofrecerá un programa con tres grandes nombres: Beethoven, Brahms y Bach.