La Casa Elizalde acoge las aventuras de ‘Cocoué’

Cuenta la leyenda del pueblo Ocume, que el dios Calabo (El que hace y deshace) cogió un día una calabaza vacía, le puso dos ramas a modo de piernas y otras dos, como brazos, y en lo alto, coronándola, la semilla esférica de un árbol exótico. A continuación, colocó en la calabaza una estrella del firmamento, y así su creación cobró vida. Esta podría ser la historia de Cocoué, que el Petit Bonhom lleva a La Casa Elizalde el próximo domingo. En cualquier caso, inspiró a la compañía el punto de partida de un espectáculo mágico y emotivo, en el que un muñeco fabricado con materiales naturales, industriales y objetos de uso cotidiano nace a la vida y descubre el mundo.

Interpretado por actores y títeres, Cocoué es una sucesión de escenas y situaciones que enfrentan al protagonista con los más diversos personajes, y que se asocian a emociones que las niñas y los niños identificarán fácilmente. La alegría, la tristeza, la empatía, el miedo, la soledad... y, finalmente, la amistad. Fèlix Cucurull y Martí Doy, actores, músicos y autores del espectáculo, manipulan los títeres, seres híbridos y únicos. Con este espectáculo, invocan la creación, la capacidad que todas y todos tenemos para hacer y deshacer con nuestras manos (como el dios de la leyenda), así como la de inventar un lenguaje, un ritmo y unos imaginarios propios.

Cocoué acompañará a los más pequeños a través de una experiencia iniciática que les descubrirá los sentimientos y emociones que hacen brillar nuestra existencia.