El Ayuntamiento de Barcelona está implementando nuevas políticas para hacer frente a la emergencia climática. Tiene una hoja de ruta, la Plan Climático , con el que quiere adaptarse a esta nueva situación y mitigar sus efectos, para proteger de esta forma la salud y el bienestar de todos los ciudadanos, especialmente de los colectivos más vulnerables, personas que bien por su situación socioeconómica o por su condición, salud o edad sufren más directamente los efectos del calor.
El refugios climáticos son una herramienta clave dentro de esta estrategia. Estos espacios, entre los que se encuentra el Museo Frédéric Marès , ofrecer entornos cómodo y accesible , para protegerse del calor durante el verano o del frío durante el invierno, a aquellas personas que no disponen de las condiciones térmicas necesarias en casa. De esta manera, el Museo cuenta con dos espacios que brindarán confort térmico a la población: el punto de información y el patio , al que normalmente se puede acceder de forma gratuita durante los días de apertura.
