La transformación de esta gran cuadrícula urbana conocida como las antiguas Casas Baratas del Bon Pastor ha consistido en crear macromanzanas de nuevas viviendas, ampliar los espacios verdes y mejorar la conectividad y la accesibilidad en todo el barrio, perfilando la que será la imagen del siglo XXI de este barrio histórico.

Todo este proceso incluye nuevos trazados de viales y diferentes servicios, sistemas de drenaje sostenible mediante parterres drenantes y una red de recogida neumática, así como la eliminación del desnivel existente entre el barrio y la cota superior de la losa de la ronda Litoral, que actúa de límite y barrera con el río Besòs.

El proyecto prevé la construcción de una plaza central, nuevos espacios con juegos infantiles, juegos de mesa, un área de pícnic, etc. Dispondrá de un ajardinamiento nuevo, ledes y un mobiliario urbano renovado (sillas, bancos, papeleras, pilones, aparcamiento para bicicletas y fuentes).

También se proponen dos tipos de aceras: las que dan continuidad a la urbanización ya existente y las correspondientes a los interiores de manzana, que incluyen pavimento de hormigón pulido antideslizante.

Con respecto a la distribución de la nueva movilidad, se crean dos jerarquías de viales: el de tráfico perimetral de este sector, que generará orden, y el de prioridad invertida, que permite la circulación interior a los vecinos y las vecinas. En conjunto, todo este nuevo espacio será más accesible, con itinerarios adaptados en todos los viales de norte a sur y de este a oeste. Los recorridos tendrán menos de un 6 % de pendiente.