Más allá de la resiliencia

Taleb acuñó el término antifrágil al constatar que hay cosas que se benefician de los impactos que reciben. Son fenómenos que crecen o prosperan cuando se ven expuestos a la volatilidad, el azar, el desorden, el riesgo o la incertidumbre.

Antifragile

Nassim Nicholas Taleb ha expandido y, en cierto modo, revolucionado el concepto de resiliencia con Antifrágil: las cosas que se benefician del desorden, un ensayo en que explora los efectos de la incertidumbre en todos los ámbitos de la vida, desde la ciencia hasta la economía, pasando por el arte, la educación o la política.

Taleb, autor de origen libanés afincado en Estados Unidos, ha sido corredor de bolsa e investigador académico, y actualmente es profesor de ingeniería del riesgo en el Instituto Politécnico de Nueva York. Taleb acuñó el término antifrágil al constatar que hay cosas que se benefician de los impactos que reciben. Son fenómenos que crecen o prosperan cuando se ven expuestos a la volatilidad, el azar, el desorden, el riesgo o la incertidumbre. Y, con todo, a pesar de su ubicuidad, no hay un antónimo de fragilidad. Taleb propone antifragilidad, un concepto que va más allá de la resiliencia o la fortaleza. El resiliente recibe el golpe y se mantiene en pie. El antifrágil, en cambio, mejora con la acometida de la adversidad. Todo lo que ha cambiado y sobrevivido a lo largo del tiempo se ha beneficiado de la antifragilidad. No podemos entender la resistencia bacteriana, ni los sistemas políticos, ni el éxito bursátil o editorial, ni siquiera nuestra propia existencia como especie sin el fenómeno de la antifragilidad. Taleb lo expresa en estos términos: “Los humanos somos mucho más aptos para hacer que para pensar. Prefiero ser tonto pero antifrágil que muy inteligente y frágil”.

Si la antifragilidad es la propiedad de todos los sistemas naturales y complejos que han sobrevivido, aislarlos y desproveerlos de factores desequilibrantes los debilitaría y a la larga los mataría. Buena parte de nuestro mundo moderno se ha estructurado con un ánimo sobreprotector, con políticas que han intentado alterar los comportamientos de los ciudadanos de arriba abajo.

Así como casi todo lo que se postula de arriba abajo bloquea la antifragilidad y tiende a debilitar el crecimiento, todo lo que crece desde abajo lo hace bajo la justa presión del estrés y el desorden.

Bernat Puigtobella

Director de Barcelona Metròpolis

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