Sant Antoni, la fiesta más diversa de los territorios de habla catalana.

En Barcelona, Sant Antoni es una festividad muy diversa que se celebra en muchos lugares de la ciudad y de formas muy diferentes. Pero nuestra ciudad no es un caso único: Sant Antoni del Porquet -o de los asnos- es una festividad muy arraigada en todos los territorios de habla catalana. Se celebra casi en todas partes y toma formas muy diferentes: fiestas con hogueras y diablos en Mallorca, las grandes Santantonades de los pueblos de los Puertos, las cabalgatas de los Tres Tombs del Principado… También son muy populares las representaciones de la leyenda del santo, las rifas de cerdos y las fiestas mayores de invierno dedicadas a Sant Antoni.

Repasamos algunas de las más destacadas, ya sea por su magnitud o singularidad:

  • Festa dels Tonis de Taradell. Las hogueras, la degustación de cerdo, las carreras de asnos y sobre todo un desfile formado por más de cincuenta caballerías -patrimonio de la villa-, que cada año se engalanan con motivos diferentes, son los principales ingredientes de la fiesta.
  • Santantonada del Forcall. Es una de las Santantonadas más completas de las que se realizan en el área de los Puertos, el Maestrat, la franja y la Terra Alta. Una trepidante representación parateatral, con santos y demonios, y la construcción y encendido de una magnífica hoguera son los dos grandes ejes de esta fiesta. Además, ha sido un modelo que han seguido más poblaciones de esta zona a caballo entre el Principado y la Comunidad Valenciana.
  • Festes de Sant Antoni a Canals. Para celebrar las fiestas de Sant Antoni, este pueblo de la Costera construye y enciende una de las hogueras más impresionantes de las que se hacen en nuestra tierra. Tiene unos dieciocho metros de altura, una forma cónica perfectamente trabajada y se enciende el primer día de las fiestas por la tarde.
  • Revetlla de Sant Antoni a sa Pobla. El 16 de enero es una noche mágica en muchas poblaciones de Mallorca, con largas revetllas alrededor de las hogueras, donde se cocinan butifarrones y se cantan canciones improvisadas. La fiesta de sa Pobla es una de las más conocidas por la gran cantidad de hogueras que se encienden y por sus diablos, pero se hacen similares en Manacor, Artà, Capdepera, Alaró…
  • Festa de l’Encamisada a Falset. Además de la tradicional cabalgata de los Tres Tombs, por Sant Antoni se conmemora en Falset una victoria de la Guerra del Francés. Esto hace que los participantes en la cabalgata vayan en mangas de camisa, tal como cuenta la leyenda, que dice que los falsetanos sorprendieron a sus enemigos en medio de la niebla camuflándose solo vestidos con las camisas blancas. La Encamisada es un buen ejemplo para entender por qué una fiesta tan extendida como Sant Antoni puede tener variantes locales muy arraigadas.

La festividad también está asociada a una gastronomía rica, a base de tortas en forma de herradura que, al igual que las de Reyes, esconden alguna sorpresa. En Forcall son muy populares los rolletes y las cocas, dos dulces rellenos de confitura de cabello de ángel que se cocinan en un horno medieval. Y en Muro y sa Pobla, dos lugares situados en una albufera, la fiesta no sería igual sin la anguila, que se come de muchas maneras diferentes: frita, en cazuela y sobre todo en espinagada. Finalmente, en la fiesta también se come cerdo, con todo tipo de comidas colectivas donde se sirven lomos, panceta, butifarras y sobrasada.