Gigantes

El origen de los gigantes festivos lo tenemos que buscar en las primeras procesiones del Corpus. En el año 1424 tenemos noticia de la participación de un primer gigante Goliat en Barcelona. A pesar de estos inicios documentados dentro de un contexto religioso, poco a poco estas figuras fueron ganando un sentido totalmente lúdico y festivo.

En el curso del siglo XIX, los pueblos y ciudades descubren en los gigantes una expresión de identidad local. Pero es a partir del primer Concurs de Gegants, Nanos i Monstros Típichs, organizado por el Ayuntamiento de Barcelona en el año 1902, cuando los redescubren con una fuerza capaz de actuar de símbolo fuera de sus términos territoriales.

Entrado el siglo XX, muchos de los gigantes que habían sobrevivido a la Guerra Civil reconvirtieron su personalidad en la de los Reyes Católicos. La reanudación del Corpus desde la óptica del nacionalcatolicismo llevó a la creación de nuevos gigantes para participar en las procesiones parroquiales bajo aspecto de reyes, fácilmente identificables con Isabel y Fernando.

Con la llegada de la democracia, muchas poblaciones reencuentran en los gigantes los elementos de identidad local y festiva. Se recuperan las figuras olvidadas y la calle reconquista la dimensión festiva. Este último reencuentro con los gigantes marca la diferencia de la nueva época del mundo geganter: se convierte en un fenómeno asociativo importante, aparecen nuevos constructores, se recuperan figuras olvidadas y se crean en poblaciones sin ninguna tradición anterior.

Por otra parte, las colles se consolidan como asociaciones legalmente constituidas que en muchos casos actúan de verdaderos dinamizadores de la vida asociativa y cultural de los pueblos y ciudades.

Con todo, el fenómeno geganter en Barcelona acaba siendo un movimiento humano de grandes dimensiones. La Coordinadora de Geganters de Barcelona se convierte en una garantía de la pervivencia de esta tradición. Son muchos los encuentros que se celebran durante el año en barrios y distritos, aunque La Mercè destaca en actividades relacionadas con los gigantes: la Xambanga, el Matí Gegant, el Séquito de Autoridades, la Cabalgata, el Toc a Plegar, etc.

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