Barcelona transita hacia un modelo de economía del dónut
La Declaración de emergencia climática nos incita a cambiar la forma como nos movemos, como nos alimentamos, como consumimos, como educamos, etcétera, y a pasar de un modelo económico basado en un crecimiento continuo, con un consumo cada vez mayor de recursos naturales, y que ha multiplicado las desigualdades, a otro que respete los límites ecológicos del planeta y garantice una vida digna para todo el mundo. El modelo de economía del dónut da respuesta al cambio necesario al que nos compromete esta declaración.
Además, este año renovamos por segunda vez el Compromiso ciudadano por la sostenibilidad, que es la hoja de ruta con la que se comprometen las organizaciones de la red B+S y el propio consistorio para llevar a cabo acciones hacia la sostenibilidad y que, en esta ocasión, se inspirará y se fundamentará en los principios de la economía del dónut. También queremos aprovechar este momento de cambio para replantear la forma de trabajo de la red B+S para generar más impacto.
Por todos estos motivos Barcelona ha empezado los trabajos para sumarse a la economía del dónut. Para hacerlo, se cuenta con el apoyo del Doughnut Economics Action Lab (DEAL), la organización cofundada por Kate Raworth para ayudar a las ciudades a llevar la economía del dónut de la teoría en la práctica.
