El confinamiento nos obliga a pasar más horas en casa y nos impide realizar algunas actividades de ocio como ir al cine. Sin embargo, Internet nos ofrece muchas opciones para ver películas de ficción y documentales desde el sofá de casa. Aquí os presentamos una selección de 10 propuestas que abordan el tema de los cuidados; desde las enfermedades mentales y el alzheimer a el papel de las trabajadoras del hogar y los cuidados o la maternidad. ¡Disfrutadlas!
Trabajadoras del hogar y los cuidados:
Trabajadoras internas del servicio doméstico (2016):
Documental producido por la Red de Mujeres de América Latina. Cuenta la historia de Lali (Ecuador), Norma (Paraguay) y Marta (Colombia) que trabajan como empleadas de hogar internas en Madrid. A través de sus historias entendemos sus miedos y frustraciones pero también sus sueños de futuro, estrechamente vinculados al cumplimiento de la ley por parte de sus contratantes.
Que horas ela volta? (traducida al castellano como «Una segunda madre», 2015)
Narra la historia de una trabajadora del hogar interna en Sao Paulo y los conflictos que genera la visita de su hija en la casa de sus contratantes. La presencia de la joven pondrá en peligro el equilibrio de la casa y la familia.
Cuidar entre terres: (2019)
Documental catalán realizado por seis mujeres. Analiza las tramas transnacionales de cuidados y las relaciones entre países del Norte y del Sur global. “Cuidar entre terres” da voz a trabajadoras del hogar migradas que asumen las tareas de cuidado y analiza las causas de sus migraciones, relacionadas con el modelo de “desarrollo” extractivista impuesto en América Latina.
Intouchables: (traducida al castellano como «Intocable», 2011)
Historia inspirada en la vida del conde Philippe Pozzo di Borgo, tetrapléjico desde 1993 por un accidente de parapente, y su relación con Abdel Yasmin Sellou, inmigrante con antecedentes penales que entró en su servicio como asistente a domicilio.
Alzheimer:
El olivo (2016):
Alma tiene 20 años y adora a su abuelo, un hombre que lleva años sin hablar. Cuando el anciano se niega también a comer, la chica decide recuperar el árbol milenario que la familia vendió contra su voluntad. Pero para ello, necesita contar con la ayuda de su tío, víctima de la crisis, de su amigo Rafa y de todo el pueblo. El problema es saber en qué lugar de Europa está el olivo.
El hijo de la novia (2001):
Rafael dedica 24 horas al día a su restaurante, está divorciado, ve muy poco a su hija, no tiene amigos y elude comprometerse con su novia. Además, desde hace tiempo no visita a su madre, internada en un geriátrico porque sufre Alzheimer. Una serie de acontecimientos inesperados le obligan a replantearse su vida. Entre ellos, la intención que tiene su padre de cumplir el viejo sueño de su madre: casarse por la Iglesia.
La música és vida (2018):
El documental “La música es vida” recoge la experiencia de meses de unos estudiantes de bachillerato de Sabadell que hacen su trabajo de investigación sobre qué efectos puede tener la música en los pacientes de Alzheimer. Los estudiantes han sido asesorados y supervisados en su trabajo para la Fundación Pasqual Maragall, dedicada a la investigación de la enfermedad de Alzheimer.
Bicicleta, cullera, poma (2010):
En otoño de 2007, a Pasqual Maragall se le diagnostica Alzheimer. Superado el golpe inicial, él y su familia inician una cruzada contra la enfermedad, y, desde el primer momento, esta película se convierte en testigo de excepción. Con inteligencia, sinceridad y buen humor, Maragall se deja retratar junto con su familia y los médicos para dejar constancia del día a día de su lucha personal.
Salud:
ma ma (2015):
Tras serle diagnosticado un cáncer de mama, Magda (Penélope Cruz), un maestra en paro, reacciona sacando a la superficie toda su energía vital. Gracias a su valentía y optimismo, tanto ella como los suyos vivirán insospechadas escenas de humor y delicada felicidad.
Las alas de la vida (2006):
El médico Carlos Cristos, que a sus 47 años padece una enfermedad terminal, llama a un director de cine amigo suyo y le propone que registre su lucha por vivir y morir dignamente, sin dramatismo, y “si es posible con una sonrisa”, acompañándole en el tránsito entre la vida y la muerte.