Una red de trenes nocturnos conectará 13 ciudades europeas, incluida Barcelona
Un nuevo proyecto prevé crear cuatro líneas de tren internacionales, que serán conocidas como Nightjet, y que incluirán una ruta que unirá Barcelona y Zúrich a partir del 2024.
Las compañías ferroviarias de Francia (SNCF), Alemania (DB), Austria (ÖBB) y Suiza (CFF) se han unido para llevar a cabo un proyecto que prevé crear varias líneas de trenes nocturnos, que llegarán a unir 13 ciudades europeas, entre las que se encuentra Barcelona.
En los próximos cuatro años, se crearán nuevas rutas que serán conocidas como Nightjet; nombre que ya reciben los trenes de la compañía ferroviaria austríaca ÖBB que circulan de noche y que, actualmente, funcionan en Austria, Bélgica, Alemania, Italia y Suiza.
Las dos primeras líneas de este nuevo proyecto entrarán en funcionamiento el mes de diciembre de este año y unirán Viena y Múnich, por un lado, y Zúrich, Colonia y Ámsterdam, por otro. En 2022, quedarán conectadas Zúrich y Roma, con parada en Milán. A finales de 2023 se prevé que queden unidas también Viena y Berlín con Bruselas y París. Y, finalmente, en diciembre de 2024 empezarían a circular los trenes directos entre Barcelona y Zúrich, la última línea prevista por ahora.
El auge de los trenes nocturnos en Europa
Este proyecto tan ambicioso responde al aumento de la demanda y uso de trenes nocturnos en Europa. Un medio de transporte que parecía condenado a desaparecer hace unos años pero que ha conseguido resurgir gracias a la toma de consciencia de muchos usuarios, que entienden la necesidad de apostar por una movilidad más sostenible. De hecho, el inicio de la creación de estas rutas coincide con el año europeo del ferrocarril (2021), que pretende fomentar el uso del tren, por ser un medio de transporte ecológico y seguro.
Un objetivo que coincide también con las líneas maestras que la Comisión Europea presentó el diciembre pasado en materia de movilidad, y que tienen como meta reducir en un 90% las emisiones de CO2 del sector del transporte el 2050. Y es que, según los datos aportados para tirar adelante las rutas Nightjet, un viaje en tren genera diez veces menos emisiones de dióxido de carbono (CO2) por pasajero que el mismo trayecto en avión.
